La Comisión Europea ha publicado nuevas directrices para combatir y prevenir los incendios forestales

26.07.2021. La Comisión Europea ha publicado recientemente las nuevas directrices para facilitar una mejor comprensión de la prevención de incendios forestales y ofrecer respuestas efectivas, particularmente en áreas que tradicionalmente son problemáticas. Dado que CILIFO es un proyecto europeo de lucha contra los incendios forestales, rehabilitación de terrenos quemados y prevención de incendios, la publicación de estas nuevas directrices no podía obviarse por los agentes vinculados al proyecto.

Las nuevas medidas previstas por la Comisión Europea para la prevención de incendios forestales afectan la forma en que gobiernan los Estados miembros, la planificación y gestión de los bosques y la forma en que todos los países implicados pueden utilizar la financiación de la Unión Europea para mitigar los efectos adversos de los incendios, con miras a la resiliencia ante las consecuencias que de ellas se derivan. La Comisión Europea reconoce la gravedad de las consecuencias directas de los incendios forestales al comprender que los bosques son esenciales para mantener la biodiversidad, regular el clima y el agua, proporcionar alimentos, plantas y materiales medicinales, capturar y almacenar carbono, estabilizar el suelo y purificar el aire y el agua. Todas las nuevas pautas están en consonancia con la protección de todo lo que nos aportan las zonas forestales, principalmente aire, agua, suelos, materias primas y vida.

Mientras que el Pacto Verde Europeo, con su estrategia para 2021, apuntaba a reconstruir el suelo y reforestar todas las zonas quemadas en territorio europeo, la estrategia hasta 2030 tiene un enfoque muy importante en la prevención y lucha contra los incendios forestales que siempre pasará por una adquisición de los adecuados material para lograr estos fines. Es importante señalar que los incendios forestales son una consecuencia directa del cambio climático, así como las sequías en verano y las plagas de especies invasoras. La tendencia siempre será que todas estas consecuencias negativas empeoren.

En toda Europa, los incendios han tenido consecuencias adversas en diversos sectores (capital natural, economía, población) y las nuevas directrices publicadas por la Comisión Europea para combatir y prevenir los incendios forestales responden a estas necesidades. Las razones dadas por la Comisión por las que el territorio europeo se ha visto amenazado por los incendios forestales son de varios tipos: cambio climático, mala ordenación del territorio, abandono de las zonas rurales, expansión urbana, y políticas de prevención y extinción de incendios débiles. Todas estas causas son la razón por la que Europa necesita mejorar sus directrices y combatir los incendios, de ahí la publicación de estas nuevas directrices.

Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europa y responsable del Pacto Verde Europeo, destaca la importancia de los árboles en el planeta y en la vida de las personas, diciendo que «es fundamental fortalecer la protección de los bosques, mejorar la prevención y reaccionar más rápidamente». Virginijus Sinkevicius, comisionado de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, dijo que estaba “convencido de que estas directrices pueden proporcionar una respuesta más eficaz y reportar grandes beneficios para las personas y la naturaleza, de la que dependemos”. La comisaria de Innovación, Investigación, Cultura, Educación y Juventud, Mariya Gabriel, declaró que «los incendios forestales pueden tener consecuencias catastróficas para el medio ambiente y para las personas». Janez Lenarcic, Comisionado de Manejo de Crisis, recordó la catástrofe que supusieron los diversos incendios en la Amazonía, declarando que “el Sistema Mundial de Información de Incendios es crucial para reportar datos sobre el peligro de incendios y áreas rurales quemadas en todo el mundo”. Jutta Urpilainen, Comisionada de Asociaciones Internacionales, dijo que “a través del Pacto Verde, nuestro objetivo es garantizar la conservación de bosques saludables para las generaciones futuras”.

Las nuevas directrices de la Comisión Europea aclaran las causas y consecuencias de los incendios forestales, así como qué hacer para garantizar su prevención. Por ejemplo, el estudio explica qué influye en un incendio (factores externos y relacionados con el bosque) y también cómo prevenir incendios (gobierno, planificación, ordenación del territorio y recursos humanos). Por último, destaca la importancia de la financiación en la lucha contra los incendios y la urgencia de tener una Europa cohesionada para conseguir estos fines. Para obtener más información sobre las pautas, visite:

Dado que CILIFO está muy presente en la lucha y prevención de incendios forestales en la Eurorregión AAA (Alentejo-Algarve-Andalucía), conviene mencionar las nuevas directrices publicadas por la Comisión Europea. CILIFO es un proyecto cofinanciado al 75% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER en el marco del programa Interreg V A España – Portugal (POCTEP) 2014-2020, con un presupuesto de 24,6 millones de euros, siendo el proyecto de Interreg con mayor financiación en la historia de Interreg en materia de extinción de incendios forestales.

 

La Comisión Europea ha publicado nuevas directrices para combatir y prevenir los incendios forestales

26.07.2021. La Comisión Europea ha publicado recientemente las nuevas directrices para facilitar una mejor comprensión de la prevención de incendios forestales y ofrecer respuestas efectivas, particularmente en áreas que tradicionalmente son problemáticas. Dado que CILIFO es un proyecto europeo de lucha contra los incendios forestales, rehabilitación de terrenos quemados y prevención de incendios, la publicación de estas nuevas directrices no podía obviarse por los agentes vinculados al proyecto.

Las nuevas medidas previstas por la Comisión Europea para la prevención de incendios forestales afectan la forma en que gobiernan los Estados miembros, la planificación y gestión de los bosques y la forma en que todos los países implicados pueden utilizar la financiación de la Unión Europea para mitigar los efectos adversos de los incendios, con miras a la resiliencia ante las consecuencias que de ellas se derivan. La Comisión Europea reconoce la gravedad de las consecuencias directas de los incendios forestales al comprender que los bosques son esenciales para mantener la biodiversidad, regular el clima y el agua, proporcionar alimentos, plantas y materiales medicinales, capturar y almacenar carbono, estabilizar el suelo y purificar el aire y el agua. Todas las nuevas pautas están en consonancia con la protección de todo lo que nos aportan las zonas forestales, principalmente aire, agua, suelos, materias primas y vida.

Mientras que el Pacto Verde Europeo, con su estrategia para 2021, apuntaba a reconstruir el suelo y reforestar todas las zonas quemadas en territorio europeo, la estrategia hasta 2030 tiene un enfoque muy importante en la prevención y lucha contra los incendios forestales que siempre pasará por una adquisición de los adecuados material para lograr estos fines. Es importante señalar que los incendios forestales son una consecuencia directa del cambio climático, así como las sequías en verano y las plagas de especies invasoras. La tendencia siempre será que todas estas consecuencias negativas empeoren.

En toda Europa, los incendios han tenido consecuencias adversas en diversos sectores (capital natural, economía, población) y las nuevas directrices publicadas por la Comisión Europea para combatir y prevenir los incendios forestales responden a estas necesidades. Las razones dadas por la Comisión por las que el territorio europeo se ha visto amenazado por los incendios forestales son de varios tipos: cambio climático, mala ordenación del territorio, abandono de las zonas rurales, expansión urbana, y políticas de prevención y extinción de incendios débiles. Todas estas causas son la razón por la que Europa necesita mejorar sus directrices y combatir los incendios, de ahí la publicación de estas nuevas directrices.

Frans Timmermans, vicepresidente de la Comisión Europa y responsable del Pacto Verde Europeo, destaca la importancia de los árboles en el planeta y en la vida de las personas, diciendo que «es fundamental fortalecer la protección de los bosques, mejorar la prevención y reaccionar más rápidamente». Virginijus Sinkevicius, comisionado de Medio Ambiente, Océanos y Pesca, dijo que estaba “convencido de que estas directrices pueden proporcionar una respuesta más eficaz y reportar grandes beneficios para las personas y la naturaleza, de la que dependemos”. La comisaria de Innovación, Investigación, Cultura, Educación y Juventud, Mariya Gabriel, declaró que «los incendios forestales pueden tener consecuencias catastróficas para el medio ambiente y para las personas». Janez Lenarcic, Comisionado de Manejo de Crisis, recordó la catástrofe que supusieron los diversos incendios en la Amazonía, declarando que “el Sistema Mundial de Información de Incendios es crucial para reportar datos sobre el peligro de incendios y áreas rurales quemadas en todo el mundo”. Jutta Urpilainen, Comisionada de Asociaciones Internacionales, dijo que “a través del Pacto Verde, nuestro objetivo es garantizar la conservación de bosques saludables para las generaciones futuras”.

Las nuevas directrices de la Comisión Europea aclaran las causas y consecuencias de los incendios forestales, así como qué hacer para garantizar su prevención. Por ejemplo, el estudio explica qué influye en un incendio (factores externos y relacionados con el bosque) y también cómo prevenir incendios (gobierno, planificación, ordenación del territorio y recursos humanos). Por último, destaca la importancia de la financiación en la lucha contra los incendios y la urgencia de tener una Europa cohesionada para conseguir estos fines. Para obtener más información sobre las pautas, visite:

Dado que CILIFO está muy presente en la lucha y prevención de incendios forestales en la Eurorregión AAA (Alentejo-Algarve-Andalucía), conviene mencionar las nuevas directrices publicadas por la Comisión Europea. CILIFO es un proyecto cofinanciado al 75% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional FEDER en el marco del programa Interreg V A España – Portugal (POCTEP) 2014-2020, con un presupuesto de 24,6 millones de euros, siendo el proyecto de Interreg con mayor financiación en la historia de Interreg en materia de extinción de incendios forestales.